lunes, 30 de abril de 2012

Los Doce siglo a siglo


29 de Abril de 2012
Este artículo lo publicaron en el nº 233 de la revista La Voz de la Merindad de fecha 15 de Abril de 2012.

Más de 400 años de vida de la Hermandad de Los Doce dan mucho de sí para rebuscar datos y curiosidades en sus libros de actas aunque, bien es verdad que muchas veces nos gustaría encontrar más anécdotas y detalles de los viajes que hicieron nuestros antepasados hasta el Santuario de Ujué.

Hace 200 años, Tafalla está ocupada por los franceses. La guerrilla de Espoz y Mina ataca la ciudad con el fin de apoderarse de 15.000 robos de cebada y avena y liberar a varios presos navarros opuestos al invasor. Cuando lo consigue, abandona a los tafalleses, dejándolos en manos francesas, que toman represalias.

En casa de Juan Francisco Ugarte se reúne la Hermandad para el ajuste de cuentas y tratar las bajas y altas de los hermanos. Tres actas de ese día documentan la reunión:

En la ciudad de Tafalla a 18 del mes de Mayo del año 1812.

Junta de la Hermandad en casa del Mayordomo Juan Francisco Hugarte para el Ajuste de Cuentas, las que vistas y aprovadas por la dicha Hermandad, dando a los Mayordomos lo que cada uno tiene suplido, como también al Señor por la limosna correspondiente a las misas establecidas, por lo que se hizo este auto y en fe de ello firmaron el Señor Por y Pte. Juan Francisco Pabolleta Secret.

Se nombraron mayordomos para el año a Antonio Adrián y Juaquín Miguel.

  En la ciudad de Tafalla a 18 del mes de Mayo del año 1812.

Junta la Hermandad en casa del Mayordomo Juan Francisco Hugarte suplico a la dicha Hermandad Manuel Navasqués que haviendo cumplido con las diez Romerías a Nuestra Señora la Madre de Uxue, suplicava a la dicha Hermandad se le concediese dicha Juvilación, por lo que viendo la Junta su proposición, se le concedió y para que conste se hizo este auto y en fe de ello firmaron Px y Pte. Juan Francisco Pabolleta Secret.

 En la ciudad de Tafalla a 18 del mes de Mayo del año 1812.

Estando Junta la Hermandad en casa del hermano Juan Francisco Hugarte propusieron los hermanos que deseava entrar en la referida Hermandad por hermano Estevan Urtasun por lo que fue admitido de conformidad y para que conste se hizo este auto y en fe de hello firmaron el Señor Px y Pte. Juan Francisco Pabolleta Secret.


Un siglo más tarde, Juan Nicol tiene 31 años. Es hijo de Juan Nicol Zalduendo y María Palacios. Tres de sus cuatro hermanastras, Luisa, Marcelina y Florentina son religiosas en Huesca. Esta última, al pronunciar sus votos, cambió el nombre por el de Ascensión. Fundó las Misioneras Dominicas del Rosario y en el año 2005 fue beatificada en Roma. Todos la conocemos por la Madre Ascensión Nicol.

Cuando Juan lleva cinco años en la Hermandad, por motivos que desconocemos, se traslada vivir a Huesca. Solicita por escrito la baja temporal. El secretario transcribe la carta al libro de actas y se admite a otra persona para cubrir la baja.  

En la ciudad de Tafalla a 31 de Marzo (Domingo de Ramos), cumpliendo lo que ordena el reglamento celebró junta la Hermandad para tratar quiénes han de llevar el paso que a la misma corresponde, siendo designados todos los hermanos.

Seguido se dio lectura a una carta del hermano Juan Nicol cuyo texto dice así:

Huesca 16 de Marzo de 1912.

Mayordomo Mayor de la Hermandad de los Esclavos de la Sra. Virgen de Ujué.

Apreciable hermano. Por haber tenido que ausentarme de esa definitivamente y como no puedo cumplir por ese motivo con los deberes del reglamento de la Hermandad, te suplico des conocimiento en junta de hermanos que con gran sentimiento solicito se me dé de baja en la Hermandad, temporalmente, pues mi mayor gusto sería si algún día volviera a esa, el poder pertenecer a ella.

Como ya está cerca el día de la Romería a Ujué, ten la amabilidad de rogar de mi parte a todos los hermanos que cuando estén en el santuario ante la Santísima Virgen y en el solemne acto de recibir las Sagrada Comunión le pidan, así como a Dios N. S., por mí en sus oraciones, pues yo en ese día, ya que no podré acompañarles corporalmente, lo haré en espíritu y en la comunión que recibiré en ese día, también pediré por todos ellos.

Con recuerdos a toda la Hermandad, se despide de todos vosotros éste que es de veras vuestro amigo.

JUAN NICOL

En vista de la carta y viendo las causas que le impiden por ahora continuar la Hermandad, accedió a lo solicitado por dicho hermano de manera que queda eliminado temporalmente y si algún día procediera entrar, se le abonaran los cinco años que llevaba.

Estando incompleta por esta baja la Hermandad, acto seguido presentó el hermano capellán como hermano al joven de esta localidad, Andrés López, hijo de hermano y viendo que era un excelente joven religioso y moral, quedó admitido por unanimidad.
                                                               El Secretario: Manuel Piraces




Cien años después, los secretarios de la Hermandad, con palabras sencillas, siguen registrando las altas y bajas de hermanos, además de las incidencias del viaje a Ujué. Sin darse cuenta, están escribiendo la historia menuda y desconocida de Tafalla.

martes, 17 de abril de 2012

Desafiando a la lluvia en la Quitana


El tiempo se ha puesto de aguas. Esta semana he recogido 14 litros. Las predicciones son de más agua para el sábado y el domingo. Le llamé a Juanjo para ver a dónde íbamos y él había pensado dar una vuelta por el Gurrucho y la Quitana porque hacía tiempo que no pateábamos esa zona. 
Efectivamente, desde el 9 de Octubre no habíamos estado por allí. 
Lo bueno de escribir un blog es que, además de que de vez en cuando alguien te lee, tienes un registro de fechas y lugares para consultar y no confiar en la frágil memoria. 
Son las 08,00 horas. Magán marca 5º y la farmacia 3º. Hace frío. El viento viene del N. En el cielo se abren grandes claros. No parece que vaya a llover, aunque en la mochila va el paraguas. 
Rosa y Juanjo nos están esperando en la calle. Enfilamos la carretera de Artajona y, al terminar el polígono, tomamos el camino de la izda. y nos adentramos en este paraje confuso que es una mezcla de Vaquero/Quitana. 
La mañana está tranquila. El frío nos hace avivar el paso. Las cebadas y los trigos verdean. Dicen los del campo que con estas aguas, si no se tuerce, se habrá perdido un tercio de la cosecha; pero lo que no ha nacido ya no lo va a hacer. 
Son las 08,25 horas. Antes de llegar al puente del canal, tomamos un camino a la dcha. que pensamos que dará un rodeo y nos llevará al Gurrucho. 
No es así. A los pocos metros muere en un sembrado. 



Ya que estamos aquí decidimos seguir por la orilla. Antes de cinco minutos llevamos los pies empapados. 
Las cebadas están cortas, pero retienen ávidamente la humedad. En un claro hacemos una parada y sacamos los prismáticos. 
Desde una perspectiva distinta contemplamos el Corral de los Toros y, arriba en el monte, entre encinas, reconocemos la esquina de La Gariposa. 





A nuestra izda., lejano, el Gurrucho nos observa con curiosidad. Seguro que no esperaba a nadie esta mañana. 
Atravesamos una pieza para llegar al camino que entra desde la carretera de Artajona. Ascendemos suavemente hasta el canal y lo cruzamos.
Este camino nos lleva por la trasera del Corral de la Quitana. Seguimos en dirección E. 
"Año 1775... que aier a lo que sería las ocho de la mañana, vio un estajo de corderos de Don Joaquín de Nieba, en una pieza sembrada de trigo de Pedro de Ollo, en el término de la Quitana y dicho ganado lo custodiaba Antonio Hugalde, alias el Jorjo" (Fernando Maiora)(Tafalla, del reino de Navarra).
La soledad es total. El camino es llano y, cuando comienza a descender, aparece a nuestra izda. inconfundible con sus cipreses, el Caserío de Valdiferrer. 





El camino tuerce en una curva de 180º y sale al principal que sube desde la carretera de Estella. 
De pronto Juanjo echa un grito. Un zorro ha cruzado el camino y se ha refugiado en la espesura. Como ha visto dónde se ha escondido, coge unas piedras y las lanza a las matas para hacerlo salir. Yo me preparo para hacer las fotos pensando que correrá por la pieza hacia el caserío, pero el zorro, que es muy "zorro", salta por el lado contrario y Rosa e Inma lo ven meterse entre los pinos. 
"Porca miseria". Soy el que hace fotos y el único que no ha visto ni chufas.
Son las 09,20 horas. Junto al barranco de Valdiferrer, antes de llegar a la balsa, hay una pequeña repoblación de acacias que, en verano, son un verdadero oasis de sombra y frescura. Enfrente de estas acacias hay un precioso rincón con pinos y unas piedras de buen tamaño. En este abrigo paramos a echar el bocadillo. Cerca de los pinos proliferan los juncos, señal inequívoca de humedades cercanas. 
Volvemos al camino y llegamos a la balsa que recoge las aguas del barranco.  Tiene poca agua, pero limpia. Nos acordamos de algunos veranos, cuando está negra y pestilente. 
Nos apetece subir al caserío. 





10,00 horas. Caserío de Valdiferrer. Visitamos primero el pozo. Un par de tejas y un tronquillo hacen de tapa. Tiene un poco de agua. 
El cielo cada vez está más nublado.  





Rodeamos toda la edificación para bajar por el mismo camino. Una pared se está derrumbando. Nos apena. 
Para no salir a la carretera aprovechamos el camino que va a nuestra izda. A este camino se le conoce como el del Alto de la Lobera. 





A las 10,20 horas llegamos al Corral de la Mariana. Otro edificio que está sufriendo los rigores de la intemperie y del abandono. Cuando las construcciones dejan de tener utilidad ganadera o agrícola, se hunden poco a poco.
Si se quiere conservar este patrimonio, no queda otro remedio que desarrollar proyectos de turismo rural, con rutas señalizadas y paneles explicativos, para que los caminantes o bicicleteros descubran en Tafalla unos paseos naturalísticos increíbles.




Resguardada del cierzo por un pequeño almendro, descubrimos la primera amapola de esta primavera. Temblorosa y desamparada, se ruboriza cuando nos paramos a mirarla.





Antes de llegar a la granja del Churrero, descubrimos un pequeño olivar con unos ejemplares centenarios. Cada uno es distinto. Nos imaginamos historias viejas junto a ellos. Cantares y hablares perdidos para siempre. Tormentas y heladas. Sequías y granizadas.   
11,00 horas. Salimos a la carretera junto a la serrería de Palito. El día cada vez está más plomizo. 
A los cerezos japoneses que adornan las aceras no les caben más flores. En la cooperativa los mostos se habrán transformado en vinos nuevos. Por la calle todavía no hay nadie. A pesar de lo que diga el calendario, el invierno no quiere marcharse de Tafalla. 


Este es el enlace para ver el recorrido 

lunes, 2 de abril de 2012

Los avellanos de Valdelobos


Cuando tenemos prisa y no sabemos a dónde ir..., siempre tenemos algún lugar para dar una vuelta.
Queríamos volver a buena hora para llegar a la procesión del Domingo de Ramos y el sábado nos entraron las dudas. 
Es pronto para ir por detrás de la Solanoa a ver si se han recuperado los robles de la sequía. En el S., caminando hacia Las Fuenticas en Olite, el campo está muy maltrecho. La sequía lo ha machacado y no se disfruta mucho del paisaje. 
Le dije a Juanjo que pensara algo y que me sorprendiera. 
Son las 08,00 horas. Magán marca 10º y la farmacia 8º. El día esta bueno para andar. No hay viento así que decido salir con poca ropa. 


Entramos por la calle Hortanco para ver los avances en las obras del Espacio Escénico. 
Salimos a las Adoberías y llegamos al Pozo Redondo. En la presa el agua se remansa. Hay tal escasez de lluvias que no salta. En un invierno normal sería un espectáculo verla. 
Juanjo me pregunta por la desaparecida fuente y le indico, más o menos, el lugar donde se encontraba. 


Por el "paseo marítimo" llegamos hasta el fondo de la nueva urbanización. En la   pequeña plaza, vacía, con la estatua dedicada a José Menéndez, recordamos su figura. Coincidí varios años con él en el viaje de Los Doce a Ujué. Hombre de profundas convicciones, tenía un carácter fuerte. En la Hermandad caminó bastantes años el primero. Tenía un "look" curioso. Iba siempre con zapatos de calle, bien domados, y debajo de la túnica, vestía camisa, corbata y americana. Compositor y escritor, le gustaba llamar a los personajes típicos y graciosos de Tafalla "personajes singulares". Él también era un hombre "singular".

Atravesamos el polígono comercial y llegamos a la Fuente del Rey. Son las 08,25 horas. Sigue echando agua. No tiene la alegría de antaño, pero mana. 
Cruzamos la autopista por el túnel y tomamos el camino de la izda. Entramos en La Navilla. 
Las viñas, podadas y limpias, reciben con alborozo la primavera. Las últimas lluvias, aunque escasas, han lavado la cara al campo; los almendros llevan tiempo vestidos de gala y los endrinos, como si fueran hileras de pompones blancos, saludan a los caminantes desde los ribazos y ezpuendas. 

08,55 horas. Llegamos a una hilera de avellanos que está junto al seco barranco. Han empezado a echar hojas. Desde este punto contemplamos Valdelobos. Una tenue neblina se agarra en el fondo del valle. La trasera de los Altos de la Guindilla es una muralla para los vientos cálidos del S.  En las cortas cebadas las gotas del aguazón brillan como diminutas lágrimas. Estamos convencidos de que tenemos enfrente un microclima.
Continuamos por el mismo camino hasta llegar al puente que cruza la autopista. Seguimos de frente y comenzamos a bajar. 
El camino vuelve a subir y luego desciende hasta llegar al principal que viene de la carretera. 

09,14 horas. Fuente de Orrocegui. Cuatro tafalleses, paseantes habituales, vienen hacia nosotros. Nos saludamos y nos dicen que saquemos fotos de la fuente porque, a este paso, dentro de poco la veremos sin agua. 
Es verdad; echa una tercera parte de agua que la última vez que pasamos por aquí. La situación es muy preocupante. Si falla está fuente es que la cosa es más grave de lo que parece; y nos parece mucho. 
Descendemos hacia el Maño. Un camión con tres grandes aspas de los molinos de viento está aparcado junto al bar. Cruzamos la carretera y llegamos a Siete Fuentes. Son las 09,35 horas. 


No apreciamos que haya bajado mucho su caudal. Echamos un par de tragos por aquello que se decía: el albañil, antes de empezar, moja la pared.
Sacamos los almuerzos. Es la hora. 
El caserío de Pueyo está silencioso y tranquilo. Los nogales que rodean la fuente todavía no han "movido". Por la carretera casi no hay tráfico. ¿Habremos retrocedido cuarenta años sin darnos cuenta?. Por la cercana vía, el Alvia pasa veloz y nos devuelve a la realidad. 
Hacemos una breve parada en el puente viejo para mirar el río. Juanjo me enseña las chipas y madrillas. Me dice que hacen falta un par de riadas para que se limpie el cauce de aguas detenidas y de algas. 
Cruzamos la vía y nos encaminamos hacia el S. Llegamos a la zona asafaltada y nos vamos a ver, de nuevo, el río en el puente que lleva a los invernaderos. 
Juanjo me señala algún barbo y más madrillas. Me dice que a finales de la primavera, bajaremos un día por las orillas del Cidacos hasta Tafalla. Él piensa que es la zona más bonita del río, hasta el Congosto. 

"17 de Septiembre de 1909: El Juzgado instruye diligencias en averiguación del hecho y sus autores. En un huerto que en el término del Congosto de la ciudad de Tafalla posee el vecino de la misma don Joaquín Garayoa, se cometió en la noche de anteayer uno de esos hechos salvajes, y que de una vez para siempre merecen sus cobardes autores un ejemplar y riguroso castigo.
Los cafres, dignos de vivir en el Rif, han destruído 95 plantas de coliflor, 26 olivos de vivero y 9 cardos.
Como siempre ocurre en casos idénticos, por desgracia repetidos con alguna frecuencia, los autores de la salvajada cometieron el delito en la mayor impunidad y hasta ahora se ignora quiénes sean". (El Eco de Navarra. Antes de Pamplona. Periódico liberal y defensor de los intereses de la misma)
10,20 horas. Volvemos para casa. En un pieza junto al camino han cortado unos cuantos olivos viejos. Han dejado los tocones y pensamos que no tardarán en salir los renuevos.
Pasamos junto al caserón que era el molino de Macocha. En la finca de al lado han hecho unos caballones bien trazados y limpios. Desconocemos si serán para espárragos u otro cultivo. 


Poco a poco llegamos a la presa de Recarte. Son las 10,50 horas. Ni gota de agua. Anuncian lluvias para Semana Santa. Juan Iribas, en su último libro, recoge un refrán chino: "Disfruta hoy, es más tarde de lo que es". Eso podríamos decir ahora contemplando el lecho seco del río: "Llueve ya, que es más tarde de lo que es". 
11,00 horas. Entramos en el pueblo. Hemos cumplido nuestro deseo. Visitar tres fuentes queridas y cercanas: la del Rey, Orrocegui y Siete Fuentes.