lunes, 8 de septiembre de 2025

Por las praderas de Madre Vieja (Funes)

Domingo, 7 de septiembre de 2025

La revista Conocer Navarra en su número de marzo de 2025 invitaba a hacer un recorrido sencillo, cómodo y corto. 

Hoy, como tenemos un poco de prisa, nos vamos para allá. 


Se trata de un itinerario por una reserva natural de 53 hectáreas de extensión en la que vamos a disfrutar de una gran variedad de aves acuáticas. 

También podremos contemplar su riqueza vegetal compuesta por carrizos, álamos, chopos, alisos, etc. 

Son las 09:00 horas. Aparcamos enfrente de la Casa de Cultura de Funes. 

El cielo está nublado pero no amenaza lluvia.

Por Santa Regina, coge la cesta y vete a la viña.

La temperatura es de 20º y el fresco bochorno hace muy placentera la mañana. 

Salimos. 

Un cartel un poco cuarteado por el sol nos informa de un recorrido por las orillas del Arga que pasa por Peralta y Falces para volver a Funes. Son 19 km pensados para BTT, pero que también será interesante transitar a pie. 


Unos metros más adelante tomamos el primer desvío a la dcha. y abandonamos la orilla del Runa, como se denominaba en la Edad Media al río Arga. 


Entramos en la zona de la  Madre Vieja.

La revista Conocer Navarra nos ilustra: 

Las Madres Viejas son antiguos meandros del río que en un momento dado dejan de ser cauce principal y quedan como pequeñas islas. 

Una vez rebasada una finca de almendros y manzanos, por un cantillo, salimos a una gran pieza plantada de acelgas. 


El regadío obra maravillas. 

Y la finca siguiente, también muy extensa, está dedicada al tomate. 

Tras orillar estas fincas, el camino vuelve a ser ancho y cómodo.

 

A nuestra izda. el agua embalsada transmite silencio y paz. 

Sergismundo, que también tiene una ruta por aquí, avisa en Wikiloc de la necesidad de ir en silencio si se quieren escuchar los graznidos de la abundante fauna. 

Nosotros, como vamos tres, nos vamos a perder toda esa sinfonía. 

Pasamos junto a una finca vallada. En su interior, una yeguada numerosa pace sin prisa. 


Cuando nos paramos a mirarla, se percatan de nuestra presencia. Dejan el desayuno y, al galope, vienen hasta el vallado. Son unos animales preciosos. 

Dos pequeña hileras de pinos jalonan un tramo del camino. 

El porte de los árboles y la tranquilidad del lugar son un regalo para la vista. 

Enseguida caminamos al lado de una pradera vallada que es el preludio de las siguientes a las que vamos a ir llegando. 

El camino continúa llano y limpio. 

Estamos llegando al final del recorrido de ida. 

Revista Conocer Navarra:

Continuando por el viejo camino, llegamos a unas amplias praderas en medio del soto, rodeadas de los antiguos cursos del río. Pertenecen a una yeguada cercana, por lo que en algún momento podremos encontrar yeguas y caballos. 

09:40 horas. Verdaderamente el lugar es fascinante. 

Damos una amplia vuelta por todo el terreno. 

Pasamos a la pradera siguiente y nos acercamos a la orilla del río. 

No apetece abandonar este lugar. 

Volvemos por el mismo camino. 

Antes de salir al camino principal, nos paramos ante un detalle que nos había pasado desapercibido a la ida. 


En la esquina exterior de una valla, atado con un pequeño collar, un perrico de alabastro permanece inmóvil ante la mirada distraída de los paseantes. 

10:45 horas. Llegamos al coche. 

Funes tiene un paraje emblemático como es el de Peñalén y todo lo que lo rodea, pero el recorrido de hoy, sencillo y fácil, merece una visita. A nosotros nos ha sorprendido gratamente.

Tiene un pero en este tiempo. Los inevitables y feroces mosquitos. 


En este enlace se puede ver el recorrido de hoy. 



miércoles, 3 de septiembre de 2025

Una caseta y dos fuentes


Domingo, 31 de agosto de 2025

El 26 de enero de este año fuimos a visitar la caseta de La Laguna que está donde comienza el camino que lleva a Romerales. 

El Voluntariado Medioambiental de Tafalla había conseguido una subvención para rehabilitarla. Iban a aprovechar para hacer también algunos trabajos en las fuentes de Resano y en la de los Falces. 

Siete meses después volvemos al mismo lugar para comprobar cómo se han  desarrollado los trabajos. 

Son las 08:00 horas. Salimos andando desde los "enredos", que decía el Templao, aunque sería más propio decir desde el término de la Pesquera, hoy completamente urbanizado y desaparecido. 

En agosto, aunque sea un poco, el que no goza del sol está loco. 

La mañana está buena para andar. Un suave bochorno nos refresca a estas horas. El termómetro marca 17º. 

Tomamos el camino de Falces y atravesamos el túnel que cruza la variante de la carretera de Estella. 

En la bifurcación seguimos por la dcha. y ascendemos por la cuesta de La Celada. 

La parada en la finca de Isabel y Agustín es obligatoria. 


Los olivos rebosan aceitunas. En las parras del fondo, las uvas se han teñido de morado. 

No podemos resistirnos y apreciamos su dulzor. 

Volvemos al camino. 

Descendemos buscando la carretera de Miranda y llegamos a las obras del TAV.

Orillando el trazado y cruzando por algún cantillo limpio, llegamos al almacén de maderas de Emilio Galar. 

El camino amplio nos acerca hasta la primera parada. 

09:00 horas. Cabaña de piedra. 

En este medio año largo que no la hemos visitado su aspecto ha cambiado por completo. 

La rehabilitación, aún sin terminar, está siendo magnífica. 


En su interior, la techumbre luce en todo su esplendor. 



Han sido horas y horas de trabajo y buen gusto empleadas en convertir una ruina en otra joya de nuestro patrimonio rústico. 

Una de las ideas que surgió cuando se iba a acometer la obra fue la de hacer que esta caseta sirviera de observatorio de aves de la La Laguna. 

El desnivel negativo y la altura que coge el cereal cuando crece hizo que se desechase esta bonita idea. 

Nosotros decidimos seguir por el camino que lleva hasta el Caserío de La Laguna y bajar hasta el antiguo observatorio. 

El camino está sucio y  descuidado. Avanzamos con mucha incomodidad. 

Al parecer, existe el proyecto de rehabilitar y poner en valor aquel antiguo observatorio que el tiempo y la dejadez llevó al abandono. 

La vista de la Laguna merece su reconstrucción. 

Desandamos el camino y salimos a la carretera. 

A unos pocos metros a la izda. hacemos la siguiente parada. 

09:30 horas. Fuente de Resano. 

El entorno no estaba mal del todo, pero el lavado de cara, y algún otro detalle añadido, le han venido de maravilla a la fuente. 

El Voluntariado ha dejado constancia de su nombre y, como los antiguos canteros, ha puesto su marca. 

Por la Cuesta de la Calera subimos al Plano. 

Viniendo de una modesta fuente a la orilla del antiguo camino de Miranda, hoy asfaltada carretera, sorprende la moderna instalación de bombeo del Canal de Navarra.

Seguimos. 

Junto a la pieza que repoblaron los cazadores con gramíneas y árboles, hacemos la parada obligatoria para reponer fuerzas. 

El día está magnífico. El campo solitario. La luminosidad de la mañana es distinta. 

A pesar del calor hay algo, difícil de explicar, que nos dice que vamos casi imperceptiblemente hacia el otoño. 

Descendemos por la Cuesta del Melón. Atravesamos un rastrojo y llegamos al tercer objetivo de esta mañana. 

10:20 horas. Fuente del Camino de Falces (o de los Falces)

Los trabajos aquí van un poco más retrasados, pero el lavado de cara y la limpieza del entorno nos auguran que el lugar va a quedar de maravilla.

 

El caño echa un humilde y constante chorrillo de agua. 

Los destrozos que se ocasionaron hace unos años durante los trabajos del arreglo del camino y que denunciamos en la aplicación Línea Verde van a ser ahora arreglados por el Voluntariado Medioambiental de Tafalla. Cueste y valga. 

Volvemos para casa. El calor empieza a apretar. 


El tubo que hemos pasado a la mañana nos espera para facilitarnos el regreso. 

10:50 horas. Callejeamos por la nueva urbanización, con la añoranza de las huertas y eras de la Pesquera. Y también, cómo no, del Árbol del Gitano. 

Año 1886. Se anuncia el arreglo del Ferial y calles que se formarán con pilastras de hierro y cadenas, en el término de la Pesquera, lindando con el término de La Celada y varias Eras. Era depositario del Ayuntamiento D. Lucas Zubiri. (Cajón de sastre tafallés)(Pedro Mª Flamarique Zaratiegui)

La rehabilitación de la caseta y de las dos fuentes avanza a buen ritmo. Un trabajo impecable. El altruismo y el buen hacer de unos cuantos, verdaderos, ciudadanos hacen posible que nuestro entorno sea cada vez mas atractivo. En breve se pondrá la cartelería y se hará la inauguración de los tres elementos. Un día importante para Tafalla. 


En este enlace se puede ver el recorrido de hoy.

 

lunes, 25 de agosto de 2025

De Olóriz a la Fuente del Yesal

Domingo, 24 de agosto de 2025

Desde febrero de este año, fecha en que Sergismundo me mandó esta ruta, tenía pendiente

hacerla, esperando a que el barranco de Mairaga no nos diera ninguna sorpresa desagradable 

Después de estos insólitos calores y con la sequía que arrastramos, vamos a subir a Olóriz a recorrer este paraje tan bonito. 

Son las 08:30 horas. Aparcamos a la entrada del pueblo. No hay nadie por las calles. 

Normal. Están celebrando las fiestas patronales en honor a San Bartolomé y a la gente se le habrá hecho tarde en la verbena. 

El día está despejado. Vamos a pasar calor. 

Por San Bartolomé, brama el ciervo por primera vez.

Nuestro termómetro marca 18º. El viento viene del S. 

Salimos.

La fuente alimenta el antiguo lavadero mediante dos alegres chorros

Cerca de ella, la parroquia de San Bartolomé parece asombrarse, abriendo su boca ante dos solitarios caminantes. 

Abandonamos el pueblo. Dos perrillos, pequeños y ruidosos, se alteran con nuestra presencia. Ladran y brincan detrás de una malla. 

Por una senda estrecha cruzamos una ezpuenda y salimos a un camino ancho. 

Lo seguimos. A unos pocos metros, nuestro recorrido nos avisa de que tenemos que tomar el camino de la dcha. 

Obedientes lo seguimos hasta salir a pieza.

 

Un hito de piedras parece indicar algo. 

Estamos en la base del túmulo de Labegaña.

Subimos a él y damos una vuelta. La vegetación ocupa todo el lugar. 

Volvemos al camino que habíamos abandonado y continuamos. 

Al ir subiendo, el paisaje se vuelve cada vez más interesante. 

Enfrente, se asoma la Peña de Unzué, mientras Echagüe parece desparramarse por su ladera. 

El camino es ancho y bueno para andar. La pendiente también es cómoda.

 En la orilla han colocado un par de hitos más. 

Una cuesta abajo pronunciada nos lleva a la carretera. 

09:30 horas. Embalse de Mairaga. 

Todo el recinto está cerrado. 

Haciendo un poco de circo, conseguimos una foto sin que el enrejado la estropee. 

Está bonito y se ve una superficie de agua importante. 

Consultamos la web de la Mancomunidad. Tiene una capacidad de 2,30 Hm3, aunque ahora mismo está al 88%, lo que quiere decir que tenemos el agua de boca asegurada para una buena temporada. 

Volvemos por la carretera y, un poco más abajo de la planta potabilizadora, por una estrecha senda, descendemos con cuidado —la pendiente es fuerte— hasta la Ermita de San Pedro de Echano. 

El lugar solitario y silencioso impone. 

Damos una vuelta alrededor del edificio y nos acercamos hasta lo que se puede ver del puente medieval. 

Volvemos a la portada principal y nos paramos a contemplarla un buen rato. 

Deleitándonos con las figuras, viene a nuestro recuerdo aquella mañana con el Templao en este mismo lugar. Fruto de la casualidad, coincidimos con Andrés Ortega, un profundo conocedor de este templo. Animado por su mujer nos dio todas las explicaciones imaginables sobre lo que se había construido allí. 

También nos habló del libro que había publicado, libro que al día siguiente fui a comprar sin perder un minuto y que conservo como una verdadera joya. 

Como no todo va a ser deleite para el espíritu, aprovechamos la sombra que proyecta el edificio y reponemos fuerzas. 

Salimos de nuevo a la carretera y vamos descendiendo suavemente.

Un camino de gravilla nos invita a torcer a la izda. 

Rodeamos el pequeño cerro y subimos por el otro lado. 

10:30 horas. Ermita de Nuestra Señora de Arrazubi.  (620 m)

Esta construcción de los siglos XII y XIII es una de las maravillas desconocidas de la Valdorba. 

Hace unos años tuvimos la oportunidad de visitar su interior. Está vacía y con las paredes desnudas, pero el exterior es una alhaja. 

Echamos un vistazo y descubrimos los restos del despoblado. 

Bajamos al camino principal y continuamos en dirección a Solchaga.

El recorrido llega al barranco de Mairaga. 

Y hay que cruzarlo. Sergismundo en Wikiloc ya advierte de que conviene llegar a este punto en tiempo seco (como hoy) porque de lo contrario te puedes encontrar con la desagradable sorpresa de tener que descalzarte para cruzarlo, o darte la vuelta y llegar a Olóriz por la carretera. 

Hoy baja poquísima agua y las piedras que sirven de pasarela están al descubierto y secas. 

Lo cruzamos. 

Un frailico amigo de Catalain. 

Llegó un día a Olóriz, a casa del Palacio de D. Juan de Olóriz, el P. Prior de Carmelitas de Pamplona, que cayó con una gran calentura y una gran "disipela" en una pierna. Todo se complicó más con otra calentura que le vino a una de sus sobrinas, Dña. Ana Lizoain de Bermejo. 

Ya habían despachado a Tafalla por un médico cuando llegó el Hno. Joaquín. Poniendo sus brazos sobre ellos hizo la señal de la cruz. Invocó a San Joaquín y a Santa Ana, bendiciéndoles con el relicario que siempre le acompañaba, pronunció la frase, santamente mágica "San Joaquín y Santa Ana, todo lo sana".

Después les mandó dormir y al despertar se hallaron del todo sanos. (Historias, sueños y leyendas de la Valdorba. Cuaderno segundo)(Pedro Mari Flamarique)

Enseguida dejamos el camino ancho y continuamos por una preciosa senda que asciende hasta dar vista a Solchaga.

Comenzamos el descenso. No subimos al pueblo y nos dirigimos a la última de nuestras paradas. 

11:50 horas. Fuente del Yesal. 

Un cartel un poco apartado avisa de la falta de garantías sanitarias. 

Un señor está cogiendo agua en unas botellas. Nos dice que lleva muchos años bebiéndola y que hasta ahora nunca le ha pasado nada, aunque ¡claro! ... añade. 

Nosotros nos refrescamos. Llevamos más de media cantimplora llena. Tenemos agua de sobra para terminar la excursión. 

Salimos de nuevo a la carretera. Este es el tramo más pesado, pero hay que volver hasta el coche. 

11:45 horas. Olóriz. 

Entramos por otro lado del pueblo y callejeamos un poco. 

Un vecino se para con nosotros y charlamos. Nos dice que tiene 90 años y que conoció a la última mujer que vivió en el despoblado de Arrazubi. Salen a relucir nuestras ascendencias valdorbesas y la conversación se anima. Pasamos un rato muy agradable. 

Volvemos para casa. Ha sido otra mañana estupenda: Paisajes, ermitas, embalse y buenas conversaciones. 


En este enlace se puede ver el recorrido de hoy.



lunes, 4 de agosto de 2025

De El Burlón a la Fuente de los Ángeles

Domingo, 3 de agosto de 2025

La última vez que estuve en la Fuente de los Ángeles fue en abril de 2021, grabando un programa para Zona Media TV. 

En junio de 2022, se produjo el terrible incendio que afectó a la Zona Media y especialmente a San Martín de Unx. 

Algunas personas me habían comentado que este incendio había afectado a la fuente. Sin embargo, otras decían que no, que ésta se había salvado. 

En la web de Zona Media a Pie recomendaban que no se subiera al Txutxo para no afectar al terreno quemado. Todo un poco confuso. 

Hoy vamos a ver cómo está todo aquello. Para hacer el paseo un poco más largo, subiremos al Alto de El Burlón y bajaremos por la pista hasta la Fuente de los Ángeles. 

Son las 08:30 horas. Aparcamos en la carretera de Ujué y retrocedemos unos cientos de metros hasta llegar al inicio del recorrido. 

El día está despejado. La temperatura es buena para andar: 13º. 

   Agosto seca el mosto, seca la mies y fríe el rostro.

Un suave viento va a hacer más llevadera la mañana.

Vamos a seguir una ruta de Sergismundo, pero más reducida, sin subir al Txutxo. 

El comienzo de la ruta no puede ser peor. Hay que subir por una ezpuenda un poco escarpada y muy sucia de vegetación. La senda es inexistente. Se hace lo que se puede. 

Una vez superada esta primera dificultad, volvemos la vista. Lo que vemos merece la pena.

 

San Martín ofrece una estampa entrañable. 

Avanzamos con dificultad. Las zarzas, ilagas y coscojas se ceban en nuestras desnudas piernas y parecen divertirse arañando sin piedad. 

Cuando el terreno se despeja un poco, cruzamos un cercado abierto por una especie de camino

Continuamos con la cerca a nuestra dcha. y vamos asciendo, ahora sí, por una senda estrecha que nos da mucha tranquilidad. 

Al otro lado de la cerca, una vaca solitaria nos mira y se esconde. 

Seguro que habrá pensado: "Están locos estos romanos".

Caminamos desde hace un buen rato por camino ancho. 

Una balsa de grandes dimensiones muestra su fondo reseco y cuarteado.

 A nuestra izda. la sierra de Guerinda cierra el paisaje mirando desafiante a la iglesia fortaleza de Ujué, que se se asoma entre el alto del cementerio y el del Guarro.

"Y en lo más alto de la sierra, unos gigantes, enemigos de la princesa Micomicoma, agitaban sus brazos sin descanso. Mas él pronto se percató de que no eran gigantes sino molinos eólicos que giraban sus aspas impulsadas por el cierzo. El parque eólico de Guerinda dicen que es el mayor de Europa ¡casi nada! (Ujué, arte, devoción, cultura. Juan Carlos Lorente Martinena)

Al llegar a un cruce de caminos seguimos por el de la dcha. 

El molino harinero de Olleta se deja ver  y contemplar desde este privilegiado lugar.  

El ascenso es suave pero continuo. 

A nuestra dcha. están los restos de un antiguo corral. Su ruina es total. Desconocemos su nombre. 

10:00 horas. Alto de El Burlón. (807 m)

La cima es un cogote totalmente pelado. 

Lo único que existe es un pequeño montón de piedras a modo de hito. 

Lo despejado del terreno nos regala un verdadero mirador. 

A nuestros pies, las ruinas del Corral de Ginés y su balsa.

A la izda. el monte Indusi. y, extendiendo la mirada, Santa Ágata, Abaiz, Peña, Oroel, Aragangoiti y el pirineo, difuminado en un pálido color azul. 

Aprovechamos para sacar el almuerzo y reponer fuerzas mientras disfrutamos de este regalo. 

Descendemos. 

Una senda estrecha, que es cañada, nos acerca hasta la pista blanca. 

Dos esforzados ciclistas suben jadeando hacia nosotros. No llevan bicis eléctricas. Nos apartamos para que pasen y los ciclistas responden a nuestros ánimos con una sonrisa. 

Nada más comenzar la pista, abrimos y cerramos una langa con una robusta cadena cerrada con un mosquetón.

El buen camino nos hace olvidar las penalidades del primer tramo del recorrido. Las sombras de los fresnos y robles hace placentero el caminar.

Las lantanas han eclosionado y muestran sus frutos de colores vivos y brillantes. 

Es sabido que en algunas regiones se hacen mermeladas y dulces con ellas, pero hay que ser muy prudentes porque las bayas pueden resultar tóxicas si no están suficientemente maduras. 

De pronto, una polvareda llama nuestra atención.

 

Un todoterreno viene arrastrando una vaca muerta.

Nos apartamos del camino y dejamos que pase el vehículo. 

Detrás del animal arrastrado, como si se tratara de un cortejo fúnebre, unas cuantas vacas y terneros siguen compungidos al triste animal. 

Esperamos un poco a que pasen todas. 

El pastor ha parado más arriba y vuelve para decirnos que podemos seguir. 

Nos cuenta que el animal llevaba varios días enfermo. Lo está subiendo hasta el comienzo de la pista para que un camión se lo lleve a incinerar. Tiene que hacerlo porque no está permitido dejárselo a los buitres. Y además, hay que pagar por la incineración. 

Un poco más adelante, un cruce a la izda. nos lleva hasta la fuente. 

Varias vacas y terneros pastan en las sombras de los árboles. No se han debido enterar del deceso. 

Subimos una cuesta larga hasta llegar a la fuente. 

11:30 horas. Fuente de los Ángeles. 

Tal como nos habían dicho, el fuego no llegó a este bonito rincón. 

Nos sentamos en uno de los bancos y disfrutamos un rato de este lugar tan agradable. 

Tenemos infinidad de recuerdos: en primavera, en invierno, con los Scouts, con la ZMTV, y tantos otros...

El caño de la fuente solamente gotea. Es raro.

 

Puede ser que se haya enronado algún tramo de la veta y sea cuestión de una limpieza y restauración a fondo. 

Es hora de volver. Salimos hacia la carretera de Ujué. 

Otra langa, esta con el mecanismo de cierre mucho más moderno, nos obliga a abrir y cerrar. 

12:30 horas. Llegamos al coche y regresamos. 

La excursión de hoy ha sido una maravilla. Hemos disfrutado de las vistas desde El Burlón; hemos asistido a un “sepelio” vacuno y, por último, hemos disfrutado, como siempre, en ese rincón tan increíble que es la Fuente de los Angeles. 


En este enlace se puede ver el recorrido de hoy.