Hace unos días, Sergismundo subió a misescapadaspornavarra una ruta por los cortados y sotos del río Aragón en Marcilla.
Me dijo que era un paseo precioso y que merecía la pena hacerlo.
Como el tiempo estaba frío e incierto, les dije a mis acompañantes que nos podíamos acercar hasta allí. Son 8,4 kms y nos iba a venir bien el paseo, aunque sólo fuera para estirar las piernas.
Son las 08:00 horas. El termómetro marca 4º, pero, con el frío cierzo, parece que la temperatura sea más baja. El cielo, por lo menos, está limpio.
En casita y con candela, todo el año es primavera.
A las 08:30 horas aparcamos junto al campo de fútbol y comenzamos nuestra ruta.
Algunos paseantes se dirigen hacia el "territorio visón", pero nosotros hoy queremos conocer "los cortados".
Caminamos por camino ancho, por debajo de la estructura de la vía férrea, de la carretera y la autopista.
Parece increíble que este inicio del trayecto conduzca a la zona que vamos a visitar.
Enseguida llegamos a la presa.
Las aguas vienen de frente y con fuerza.
Antes de llegar a la orilla, haciendo grandes remolinos, se alejan ocultándose en la espesura del arbolado.
Una senda desdibujada nos va llevando por la orilla del río y nos permite admirar los primeros cortados. del recorrido.
Las descarnadas paredes verticales hacen de telón de fondo del agua remansada.
La campa por la que caminamos es amplia. La hierba alta y fresca es un bálsamo para la vista y para las piernas.
A nuestra izda. hay depositados grandes montones de ramas y tocones de troncos.
No lo sabemos, pero intuimos que están destinados a madrigueras de visones.
09:00 horas. Entramos en una zona que Sergio llama "bosque de ribera".
La vegetación se vuelve tupida. El camino es sombrío y se nota el cambio de temperatura.
Entre los claros que dejan los grandes chopos, podemos seguir disfrutando del río y de los cortados.
Salimos del pequeño bosque y continuamos avanzando cerca de la orilla.
09:25 horas. Después de pasar por terrenos abiertos, volvemos otra a vez a internarnos en el arbolado hasta llegar a la "madre vieja".
Sergismundo en Wikiloc: por sendas y caminos, entre bosque de rivera y cortados, junto a playas de cascajo y choperas, vamos a ir remontando el cauce hasta las cercanías de la antigua Azucarera.
Cabe destacar la colonia de buitres leonados que vimos en uno de los cortados cercanos a la Azucarera
Juanjo nos explica que los ríos, a veces, sufren transformaciones naturales por grandes avenidas y modifican su cauce, dejando un tramo de agua estancada en el cauce primitivo. A eso se le donomina "madre vieja".
El recorrido termina en una extensa playa fluvial de cascajo.
09:50 horas. Aprovechamos el tronco de un árbol para recuperar fuerzas.
El sol y el abrigo del viento consiguen que la mañana se vuelva agradable.
El río discurre suave, sosegado.
El silencio, la calma y la soledad se han adueñado de este lugar.
Para volver tenemos que hacer el camino a la inversa, pero ahora tomaremos un par de desvíos para acercarnos a la orilla del Aragón.
Un perrillo gritón e inquieto se acerca hasta nosotros. No sabemos sus intenciones. No para de acosarnos.
Le lanzamos un palo y entonces descubrimos que lo que quiere es jugar.
Palos y piedras. Con cualquier cosa que le arrojes, sale corriendo y regresa con ella en la boca.
Por fin aparece el dueño y se lo lleva.
Volvemos.
Un pequeño desvío nos acerca hasta el río.
La pared que cierra la curva impresiona por su verticalidad.
Volvemos al camino.
10:25 horas. Otro desvío nos invita a visitar la orilla.
El arbolado y la vegetación son fantásticos.
Caminamos por la orilla. Es otra larga playa fluvial.
Por encima del cortado, los buitres planean haciendo grandes círculos.
De algunos agujeros de la pared, las grajas entran y salen en un vuelo inquieto y veloz.
El cielo se va encapotando poco a poco. La mañana ha cambiado.
En las orillas del camino, los escaramujos se han vestido de primavera. Están llenos de flores pintadas en blanco y rosa.
Volvemos hacia el coche.
En este punto, el contraste entre la vida moderna y la naturaleza es absoluto.
Son las 11:25 horas.
Un paseo corto y agradable. Totalmente llano.
Un placer conocer estos lugares tan distintos y tan bellos.
En este enlace se puede ver el recorrido de Sergismundo que es el que hemos seguido nosotros hoy.
Algunos paseantes se dirigen hacia el "territorio visón", pero nosotros hoy queremos conocer "los cortados".
Caminamos por camino ancho, por debajo de la estructura de la vía férrea, de la carretera y la autopista.
Parece increíble que este inicio del trayecto conduzca a la zona que vamos a visitar.
Enseguida llegamos a la presa.
Las aguas vienen de frente y con fuerza.
Antes de llegar a la orilla, haciendo grandes remolinos, se alejan ocultándose en la espesura del arbolado.
Una senda desdibujada nos va llevando por la orilla del río y nos permite admirar los primeros cortados. del recorrido.
Las descarnadas paredes verticales hacen de telón de fondo del agua remansada.
La campa por la que caminamos es amplia. La hierba alta y fresca es un bálsamo para la vista y para las piernas.
A nuestra izda. hay depositados grandes montones de ramas y tocones de troncos.
No lo sabemos, pero intuimos que están destinados a madrigueras de visones.
09:00 horas. Entramos en una zona que Sergio llama "bosque de ribera".
La vegetación se vuelve tupida. El camino es sombrío y se nota el cambio de temperatura.
Entre los claros que dejan los grandes chopos, podemos seguir disfrutando del río y de los cortados.
Salimos del pequeño bosque y continuamos avanzando cerca de la orilla.
09:25 horas. Después de pasar por terrenos abiertos, volvemos otra a vez a internarnos en el arbolado hasta llegar a la "madre vieja".
Sergismundo en Wikiloc: por sendas y caminos, entre bosque de rivera y cortados, junto a playas de cascajo y choperas, vamos a ir remontando el cauce hasta las cercanías de la antigua Azucarera.
Cabe destacar la colonia de buitres leonados que vimos en uno de los cortados cercanos a la Azucarera
Juanjo nos explica que los ríos, a veces, sufren transformaciones naturales por grandes avenidas y modifican su cauce, dejando un tramo de agua estancada en el cauce primitivo. A eso se le donomina "madre vieja".
El recorrido termina en una extensa playa fluvial de cascajo.
09:50 horas. Aprovechamos el tronco de un árbol para recuperar fuerzas.
El sol y el abrigo del viento consiguen que la mañana se vuelva agradable.
El río discurre suave, sosegado.
El silencio, la calma y la soledad se han adueñado de este lugar.
Para volver tenemos que hacer el camino a la inversa, pero ahora tomaremos un par de desvíos para acercarnos a la orilla del Aragón.
Un perrillo gritón e inquieto se acerca hasta nosotros. No sabemos sus intenciones. No para de acosarnos.
Le lanzamos un palo y entonces descubrimos que lo que quiere es jugar.
Palos y piedras. Con cualquier cosa que le arrojes, sale corriendo y regresa con ella en la boca.
Por fin aparece el dueño y se lo lleva.
Volvemos.
Un pequeño desvío nos acerca hasta el río.
La pared que cierra la curva impresiona por su verticalidad.
Volvemos al camino.
10:25 horas. Otro desvío nos invita a visitar la orilla.
El arbolado y la vegetación son fantásticos.
Caminamos por la orilla. Es otra larga playa fluvial.
Por encima del cortado, los buitres planean haciendo grandes círculos.
De algunos agujeros de la pared, las grajas entran y salen en un vuelo inquieto y veloz.
El cielo se va encapotando poco a poco. La mañana ha cambiado.
En las orillas del camino, los escaramujos se han vestido de primavera. Están llenos de flores pintadas en blanco y rosa.
Volvemos hacia el coche.
En este punto, el contraste entre la vida moderna y la naturaleza es absoluto.
Son las 11:25 horas.
Un paseo corto y agradable. Totalmente llano.
Un placer conocer estos lugares tan distintos y tan bellos.
En este enlace se puede ver el recorrido de Sergismundo que es el que hemos seguido nosotros hoy.
No hay comentarios:
Publicar un comentario