Domingo, 12 de Octubre de 2014
La semana se ha puesto de "aguas". 22 litros he recogido en estos cuatros días lluviosos. En los caminos hay barro y, si se nos ocurre atravesar algún barbecho, ni te cuento.
Cuando el tiempo está así utilizamos los caminos "blancos". Se puede andar bien y no nos metemos en barrizales.
Son las 08,00 horas. Magán marca 16º y la farmacia 14º.
El cielo está despejado. La luna, que acaba de entrar en mengua, se resiste a desaparecer. La mañana está fresca pero agradable para andar.
Por los "enredos" llegamos al corral de la Somatilla. Enfilamos el camino en dirección S.
Las pocas viñas que quedan ya han sido vendimiadas.
En las Badinas los maizales están inundados de agua.
Volvemos la vista hacia el O. En la sierra de Ujué y en los Altos de Guerinda unos negros nubarrones se han agarrado con fuerza. Si suben por el corredor de la sierra de Izco y de Alaiz llegarán a la Cuenca y soltarán agua, pero si consiguen llegar a Valmayor, nos mojaremos.
08,40 horas. Damos vista a la central eléctrica. Los grandes claros dan paso a densas y amenazantes nubes.
El camino es bueno para andar. Amplio y sin charcos, contrasta con lo embarrando que se ve el campo.
Una enorme finca de maíz ya ha sido cosechada. Su vecina parecer observar temerosa lo que le harán dentro de poco a ella.
Cruzamos el puente por encima de la autopista y salimos a la carretera de Peralta.
Tenemos enfrente el camino que va por la muga entre Olite y Tafalla. Las tablillas que lo flanquean nos invitan, tentadoras, a adentrarnos por él. Pero nuesta idea para hoy es otra. Vamos a visitar las dos fuentes de Olite.
Antes de adentrarnos en el túnel que salva la carretera, un cartel indicador nos canta los monumentos de nuestros vecinos.
Llegamos a las primeras casas de Olite.
Una antigua conocida de Tafalla, afincada allí, está paseando un hermoso setter irlandés. La conversación se prolonga recordando a nuestras familias.
Entramos en el pueblo.
Hay bastante actividad. Algunos jóvenes y otros no tanto, hacen estiramientos y carreras cortas.
Un cartel junto al bar Orly nos aclara las cosas. Se va a celebrar una carrera. Son las X millas de la Ruta del Vino.
09,45 horas. Fuente del Chorrón. De sus caños el agua brota con fuerza. En los bancos cercanos sacamos los bocadillos y recuperamos fuerzas.
Volvemos a cruzar otra vez el Cidacos y, por el camino que va paralelo a las vías, llegamos a las Fuenticas.
La chopera donde se encuentra la fuente es ahora un vergel. Limpio y cuidado, hemos conocido este lugar lleno de basuras y maleza.
Tomamos el camino que sube a Tafalla. Aquí el paisaje también se ha transformado. Lo que antes no eran más que viñas y cereal, ahora son grandes extensiones de maíz.
Un vocerío, precedido de un coche, nos hace detenernos. Por detrás viene la carrera. Los primeros van veloces y frescos. Conforme van pasando los corredores, las caras de cansancio, incluso de asfixia, dan idea de la dureza de la prueba.
11,00 horas. Caserío de Solrío. El enorme pozo que quedó al descubierto cuando hicieron el camino nuevo, está protegido por un quitamiedos. Recordamos cuando volvimos un domingo de andar y nos encontramos con la alcaldesa. Juanjo le comentó el peligro que había, dada su profundidad. El comentario surtió efecto porque, a los pocos días, el pozo contaba con la protección.
Pasamos por Solcanto y echamos un vistazo al cerro donde parece ser que estaba la ermita de Santa Marina.
En los Cascajos no hay nadie. La viña de Biorlas ya está vendimiada. A los huertos de Torreta esta mañana no ha venido nadie. El día se está estropeando por momentos. Se ha nublado y el fuerte viento del sur puede sacar agua a la tarde.
26 de Junio de 1732. Martín de Najurieta, guarda, manifiesta haber cogido al hijo de "Dinbadamba" con tres bueyes de la carnicería, dentro de una pieza sembrada de trigo, en Los Cascajos, de Don Martín de Larrea, ayer tarde como cinco y seis, y sacó los bueyes y los entregó al susodicho. (Fernando Maiora)(Tafalla del Reyno de Navarra)
11,45 horas. En la presa de la estación el río ha vuelto a saltar. El Cidacos "está con ganas". En cuanto caen unos pocos litros, se pone valiente y muestra sus credenciales.
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