domingo, 14 de noviembre de 2010

Un robo en la cañada



Este artículo lo publicaron en el nº 201 de fecha 15 de Noviembre de 2010 del semanario La Voz de la Merindad.


Por Tafalla pasan dos cañadas principales que van a los montes de Andía. Una es la Cañada Real de la Bardena y otra es la Cañada Real del Roncal. La primera, con una anchura de 40 metros, va paralela a las mugas de Falces, Miranda de Arga y Larraga, por el extremo occidental del Saso, Candaraiz y La Sarda.


La otra Cañada, conocida antiguamente como “cañada de Balgorra”, viene por los Altos de Lerga y de Olleta, cruza el término de San Martín por su borde norte, entra en Tafalla por Pozuelo, y llega al Mocellaz cruzando Valgorra y el Portillo del Aire. Al oeste del pueblo continúa por Margalla y por los altos del Planillo, llega a Porputiain, Valditrés y Beratxa, hasta que en la muga de Larraga empalma con la Cañada real de la Bardena.


Hoy nos vamos a ocupar de esta Cañada Real del Roncal. Todavía se pueden ver en muchos puntos los mojones de piedra que la señalan. En su parte oriental ha sufrido algunas modificaciones irreversibles. Primero la cortó el ferrocarril, años más tarde lo hizo la autopista y el último corte lo ha hecho el Canal, que se ha llevado por delante el Portillo del Aire.



En lo más alto del camino del Mocellaz (comúnmente denominado Morcellar, Morcillar), en la margen derecha cuando se da vista a Valgorra y Pozuelo, se podía disfrutar de una pequeña cruz devocional de piedra, sin brazos, en la que se leía: de Codés una salve. Año 1752. La inscripción completa podría ser: Aquí se reza a Ntra. Sra. de Codés una salve. Año 1752. El día 12 de Octubre pasamos por ese camino y la cruz seguía allí. El día 31 del mismo mes volvimos a pasar, camino de Santa Zita, y había desaparecido. La han desencajado de la piedra que la soportaba y se la han llevado. Durante más de 250 años había permanecido en ese lugar y alguien, para adornar su huerto o su txoko, o para que le den unos míseros euros nos ha robado a todos una pieza de las pocas que tenemos en el patrimonio rural de Tafalla.



¿Se podía haber evitado este expolio? Hace años desapareció la Cruceta en el Plano y a casi nadie le importó. Ahora han robado esta pequeña joya y todo seguirá igual. Pero algo habrá que hacer.


Es triste reconocerlo, pero hoy en Tafalla todos somos un poco más pobres.



Fuentes consultadas: Toponimia histórico-etnográfica de Tafalla. José Mª Jimeno Jurio.


1 comentario:

  1. Cuanta razón. Cuantas pequeñas historias desaparecidas fruto de la dejadez de muchos, la ignorancia de unos y la "inteligencia" de unos pocos.

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